LA PEREZA: EVÍTALA Y VERÁS QUE SUCEDE

     

     Buena definición la que aparece en la imagen superior, no creéis. Aún así, podemos ampliarla diciendo que la Religión Cristiana la considera uno de los siete pecados capitales (junto a la Avaricia, Envidia, Gula, Ira, Lujuria y Soberbia). Además, es cierto que a las personas que evitan, consciente y voluntariamente realizar cualquier actividad de las cuales no prevean obtener un beneficio inmediato se las llama vagas.

     El psicólogo terapéutico Kalman Glantz dice que "la vagancia se hizo posible cuando se comenzó a planear para el futuro", pues en el pasado los seres humanos gastaban sus energías para el beneficio del aquí y del ahora, si tenían hambre cazaban, si tenían sed bebían, etc.

     Aún así, las causas para ser o parecer perezosos pueden ser variadas, desde una mala alimentación, pasando por alguna enfermedad, o falta de motivación, etc.

     Por todo lo anterior, mi enfoque coincide con el de Jean Jacques Rousseau (1712-1778), suizo-francófono que poseía conocimientos sobre diversas disciplinas, fue a su vez escritor, pedagogo, filósofo, músico, botánico y naturalista, esto es un "polímata", el cuál consideraba a la Pereza como un asunto psicológico más que físico. Pues por ejemplo a las personas que padecen enfermedades no podemos ni debemos considerarlas perezosas, pues su afección es física y en muchos casos limitante.

    

     Para todos los demás, ¡no hay excusas!, sólo tenemos que tomar consciencia de la Pereza cuando ésta nos "ataque" e intentar evitar sucumbir ante ella, para lo cual es imprescindible que tengamos intencionalidad para querer evitarla y a continuación actuemos en consecuencia, activándonos y poniéndonos en movimiento de forma inmediata; un ejemplo claro es cuando suena el despertador por la mañana y comenzamos a "remolonear" en la cama pensando "en cinco minutos me levanto", pues ahí está actuando ya la pereza, por lo que, cuando ese pensamiento pase por tu cabeza, inmediatamente levántate y ésta ya será una batalla que abrás ganado a la Pereza, ¡no lo olvides!.

     Lo mismo ocurre con tantos otros ejemplos, sea a nivel personal o profesional, ¿os suena el pensamiento "mañana lo hago"?, seguro que sí.

     Pues bien, ya sabéis identificar este "vicio", con lo que si lo queréis evitar recordad: consciencia-intención-acción, está en vuestras manos. Lo que si os aseguro es que si lo conseguís la recompensa será grande, tanto a nivel emocional como físico, pues la acción reporta bienestar mientras que la pereza apatía, aburrimiento y en ciertos casos, depresión.

 

¡HASTA PRONTO!