LA PASIÓN

     Voy a abordar el tema de esta semana atendiendo a su significado de "sentimiento o emoción muy fuerte que una persona siente hacia algo", que no hacia alguien, pues esta ya sería otra acepción.

     

     Este "algo" puede ser cualquier actividad que uno emprende con ganas, con entusiasmo, que no aporta otra cosa que satisfacción a la persona que la realiza. Hay individuos cuya pasión es por ejemplo la escritura o la lectura, y pueden pasarse horas dedicados a las mismas sin "esfuerzo", esto es, sin que les pese, digamos que aquí la pasión puede interpretarse como "devoción".

     Igualmente, para otros individuos su pasión puede estar en el amor hacia los animales o la naturaleza, disfrutando cuando se encuentran en un entorno de este tipo. Para otros puede ser la cocina, o el Arte, y así podría continuar con ejemplos, por lo que a partir de aquí que cada uno de vosotros piense en los que crea convenientes, o mejor aún, pensad en algo que realmente os apasione, en vuestra "pasión personal", ésta puede encontrarse bien en una actividad que ya realizáis o bien en alguna que os gustaría realizar pero que por circunstancias, todavía no habéis iniciado. Verdaderamente podéis comprobar que sólo con pensar en vuestra pasión ya estáis disfrutando, notáis que la alegría se hace presente en vuestro ser.

     Continuando con este maravilloso tema, deciros que algunas personas consiguen hacer de su pasión su profesión, con lo que su realización personal y profesional van de la mano, por poner un ejemplo pienso en los montañeros o alpinistas profesionales. Otros consiguen por su parte dedicarse a su pasión a modo de hobby, en su tiempo libre, sea ésta por ejemplo la práctica de alguna actividad deportiva o bien cualquier otra, como la pintura, etc.

     Pero, para ir terminando, no puedo por más que finalizar esta entrada con una alusión directa a la para mí al menos la mejor PASIÓN que puede haber, la cual a lo mejor habéis adivinado, y no es otra que "LA PASIÓN POR LA VIDA". Yo personalmente admiro a las personas con esta pasión, pues las mismas siempre transmiten alegría y bienestar a la gente con la que se relacionan, mejorando con ello su entorno, y por regla general son muy buenas personas, únicas capaces por otra parte de mejorar nuestro mundo.

¡ HASTA PRONTO !

LA PACIENCIA COMO VIRTUD

     Sí, habéis oído bien, yo elevo la "Paciencia" a la categoría de "virtud", pues las personas que desarrollan esta capacidad de ser pacientes se caracterizan por tener la templanza necesaria para esperar con calma a que las cosas sucedan, saben soportar las adversidades de la vida con entereza, aceptando, al igual que los filósofos clásicos estoicos*, que no hay que preocuparse demasiado por las cosas que no dependen de uno, dejando a las mismas estar, con la confianza que a su debido tiempo se resolverán. O lo que es lo mismo, de lo que depende de uno no se preocupan, se ocupan, pero de lo que no depende de uno, de esto recomiendan no preocuparse en absoluto, pues la preocupación genera sufrimiento y en este caso, un sufrimiento inútil.

     En el mundo actual comprobamos diariamente que se vive muy deprisa, una de las características principales de las sociedades capitalistas es la "inmediatez", esto es, todo se quiere para ¡ya!, podemos afirmar que la "impaciencia" está "de moda", pero no nos equivoquemos, pues la misma no es una "virtud" sino todo lo contrario, más bien es un "defecto", un "fallo", y sus consecuencias por tanto negativas. Pues una persona o sociedad impaciente sufre un alto nivel de estrés, de ansiedad crónica, y un elevado nivel de insatisfacción, y derivado de todo esto, de desdicha e infelicidad.

     Por todo lo anterior, yo recomiendo que cada uno de nosotros, en nuestro ámbito particular, personal, familiar, profesional y social seamos capaces de dedicar tiempo a "cultivar la paciencia", pues esta virtud se puede "aprender", con práctica, siendo conscientes en cada momento de si la solución de una situación determinada depende de nosotros o no, pues cuando distingamos esto seremos capaces de tomarnos las cosas con más calma, y con calma, no nos quepa duda, los juicios y decisiones que adoptemos serán más acertados.

     Para terminar por esta semana, os digo que el tiempo que invirtamos en "aprender a ser pacientes" será un tiempo muy bien empleado. ¡Ah!, por cierto:

"No confundas la paciencia, coraje de la virtud, con la estúpida

indolencia del que se da por vencido"

Mariano Aguiló (1825-1897) - Poeta español.

     * Y ahora, para los que queráis ampliar información sobre los filósofos clásicos, y por ende entre ellos "los estoicos", en cuanto a este tema y la felicidad, podéis hacerlo en los enlaces siguientes, trilogía de entradas de este blog que publiqué en el mes de Abril de 2.017: 

LA FELICIDAD A TU ALCANCE. PARTE PRIMERA 

LA FELICIDAD A TU ALCANCE. PARTE SEGUNDA 

LA FELICIDAD A TU ALCANCE. PARTE FINAL 

LA RELATIVIDAD DEL TIEMPO

     Aunque el título de esta entrada pueda parecer contradictorio, a lo largo de la misma iréis comprobando que no es así, pues el mismo atiende a las distintas sensaciones que las personas experimentamos mientras pasa.

     Y es que, el tiempo como magnitud física fundamental puede ser medido, y con ello podemos determinar la duración de una acción o suceso. Siendo la unidad de tiempo base el segundo (considerando que éste equivale a la 86.400 ava parte del día solar medio), como múltiplos de éste tenemos el minuto que equivale a 60 segundos, la hora que equivale a 60 minutos, el día que equivale a 24 horas, etc.

     Visto así podríamos afirmar que, objetivamente es como las matemáticas, "una ciencia exacta", que no cabe la relatividad, pero para mí ésta si que cabe si atendemos a la parte subjetiva, esto es, a la interpretación que cada individuo le damos a la hora de valorar el paso del tiempo a lo largo de nuestra vida, o mejor dicho, cuando valoramos como pasa nuestra vida a lo largo del tiempo.

     Para ello sólo tenemos que preguntar, por ejemplo a los jóvenes menores de 18 años: ¿Cómo pasa el tiempo para ti, rápido o lento?, observaremos que una gran mayoría contestarán que pasa lento, pues desean cumplir la mayoría de edad lo antes posible, y para un adolescente de 15 años los 18 están muy lejos. Sin embargo, si la pregunta se la hacemos a una persona de avanzada edad y que disfrute de buena condición física, es probable que nos conteste que el tiempo pasa muy deprisa, ¿Por qué? pues porque para esta persona su "ocaso" esta más cerca, y al ser consciente de ello es como si el tiempo se le escapara de las manos.

     Por otro lado, si a cualquiera de nosotros nos preguntan: ¿Qué es para ti un segundo?, seguramente contestaríamos que un segundo "no es nada", pero si esta misma pregunta se la hacen a un piloto de motociclismo o de Fórmula 1 la cosa cambia, verdad, pues un segundo para ellos en su ámbito deportivo es muchísimo tiempo.

     Hecho este análisis sobre el tiempo y su relatividad, ahora voy a intentar dar una explicación sobre esta última, y es que considero que la percepción que tenemos los humanos sobre el paso del tiempo va a depender, como casi todo, de nuestras circunstancias personales, relacionando un paso del tiempo rápido normalmente con acontecimientos positivos, pues, para una persona que tiene la sensación de que, por ejemplo, los últimos 10 años se le han pasado volando, esto es un indicador de que ha sido relativamente FELIZ, de que ha disfrutado con intensidad de su vida y por lo tanto de su tiempo.

     Sin embargo, para una persona a la que, por ejemplo, el último año se le ha hecho interminable, esto será un reflejo claro de que durante el mismo, casi con toda seguridad, ha sufrido acontecimientos tristes y desafortunados en su vida, siéndole por tanto la felicidad un tanto esquiva.

      

Concluyo ya este análisis deseando para todos 

que vuestra respuesta al paso del tiempo sea que éste pasa rápido, señal inequívoca de que disfrutáis de una buena y agradable vida, 

¡no lo olvidéis!.

LA RISA, ¡¡¡ CUANTA MÁS MEJOR !!!

"Ríete siempre que puedas, y cuando no

al menos intenta sonreír"

Juan Ramón (o lo que es lo mismo, frase mía)

     Actualmente vivimos "muy deprisa", con cierta sensación de "estrés", la vida no es fácil ni sencilla para nadie, ¿o somos nosotros los que la hacemos difícil?.

     De cualquier manera, no son pocos los "problemas", perdonad pero no me gusta ese término, prefiero pensar que los "problemas" no existen, que lo que existen son "situaciones" que tenemos que afrontar y "decisiones" que hemos de tomar. 

     Pues bien, estas "situaciones" muchas veces nos generan preocupación y, digámoslo así, nos pueden afectar en nuestro estado anímico, haciendo que nos sintamos "tristes" y "apáticos", tanto con nosotros mismos como con nuestro entorno y las personas con las que nos relacionamos, no aportando nada bueno, sino todo lo contrario, pues nos pueden ocasionar ansiedad o melancolía, impidiendo que nuestras relaciones sociales sean satisfactorias y disfrutemos de ellas.

 

     Ante esta "forma o manera de vivir", la cual soy partidario de que todos y cada uno de nosotros hemos de intentar cambiar, están surgiendo ya desde hace algunos años distintas terapias, siendo una de ellas "LA RISOTERAPIA", sí, la cual consiste en reunirse un grupo de personas para "reírse", y reírse con ganas, a tope, pues si esto se consigue la persona recibe, por medio de la risa, un "chute" de alegría instantánea y positividad.

     No hay nada más gratificante que "llorar de risa", pues al hacerlo experimentamos un "subidón de euforia" arrollador.

     Pero visto lo anterior, debo decir que no es imprescindible asistir a estas terapias de "RISOTERAPIA", sino que lo que hemos de procurar cada uno de nosotros es reír y sonreír cada día, intentemos al menos que nuestra voluntad se dirija hacia ese objetivo, siendo nuestra predisposición para ello fundamental.

 

     Aparquemos, por ejemplo, nuestras "situaciones personales delicadas" cuando estemos con nuestros amigos o seres queridos e intentemos disfrutar de su compañía, riéndonos con ellos y logrando "momentos mágicos", momentos en los que piensas "¡Por esto (entre otras cosas) merece la pena vivir!". Y si estos momentos tan agradables pasan de ser algo ocasional a algo más habitual observaremos una mejoría en nuestro estado anímico y emocional, y porque no decirlo, en nuestra salud general. Y no lo dudemos que con esta "alegría contagiosa" veremos nuestras situaciones personales desde otra perspectiva, con más calma y serenidad, para así ser capaces de tomar ante las mismas las decisiones más acertadas.

     Me despido ya, recordándote que te rías a tope, con tu familia, con tus amigos, con tus compañeros de trabajo, etc. Y sonríe siempre, pues no hay nada mejor que comenzar el día con una sonrisa. Muestra tu bonita sonrisa a todas las personas con las que te encuentres cada día y no temas, pues recibirás de ellos su mejor sonrisa.

     Y ahora, puesto que ya estamos en periodo de rebajas, aquí os dejo un enlace a una entrada que publiqué hace 6 meses tratando este tema, para quién quiera recordarla o bien para los que se hayan incorporado tarde al seguimiento de este blog:

LAS REBAJAS: PSICOLOGÍA INVERSA