Mucho se ha escrito y mucho se habla sobre el tema de la vida, sobre el misterio y la complejidad de la misma, así como sobre los distintos caminos que nos pueden llevar hacia una "buena vida" o no.
Desde el momento en que nacemos, nuestras vidas comienzan ya a estar "conducidas o guiadas", primero por nuestros padres y después por la propia sociedad y cultura en la que nos ha tocado vivir a cada uno, esto es lo que denominamos "Socialización". Pues bien, esta "Socialización primigenia" ya nos va a ir marcando unos objetivos que debemos ir alcanzando para desarrollarnos como "buenas personas", "buenos profesionales", etc., para así llegar a la juventud y posteriormente a la edad adulta preparados para ocupar nuestro lugar en la SOCIEDAD.
Podemos afirmar por tanto, que estos objetivos son el "Motor" que nos impulsa hacia nuestra evolución y desarrollo personal, pero no debemos pasar por alto el hecho de que estos "Objetivos" en cierto modo nos vienen "impuestos", como comentábamos anteriormente, bien por nuestros padres, bien por la sociedad en la que vivimos, por el "grupo de iguales", etc.
Pues bien, no debemos menospreciar esta base, que al final es la que conforma la personalidad de cada uno, pero llegados a cierta edad (juventud, edad adulta...) debemos ser capaces de dotar a estos "CIMIENTOS" de nuestra personalidad de una buena estructura, estando ésta dotada, como no, de nuevos y estimulantes objetivos que nos hagan continuar avanzando por la vida con ilusión, pero esta vez, y esto es lo más importante, estos objetivos van a estar marcados por nosotros mismos, objetivos propios y personales, que son y serán los que llenen nuestra vida de riqueza y equilibrio, tanto psíquico como emocional; pues como bien es sabido, una vida sin objetivos es una vida "vacía", "sin ilusión" y, por lo tanto, de tristeza y frustración.
Debemos tener muy presente la máxima que mantiene que: "Cuando llegue a la recta final de mi vida y haga un análisis o recorrido sobre la misma, yo no quiero ser de esos que dicen: "Debería haber hecho esto o intentado aquello...", sino que lo que anhelo es que llegado ese momento pueda decir: "Hice esto, intenté lograr aquello, tuve un sueño y lo perseguí, estuve ilusionado y luche por esto y por aquello, estos objetivos que me marqué los conseguí y estos otros no, pero al menos me voy satisfecho porque siempre lo intenté", ¿Cómo?, pues "viviendo la vida disfrutando de cada instante, viviendo el presente, siempre ilusionado"; pues no hay nada peor que lamentarse por aquello que uno hubiera querido hacer pero que ni siquiera intentó, unas veces por falta de "valor", otras poniendo excusas, "no hice esto por tal, no perseguí mi sueño por cual..."
Por todo lo expuesto te digo: ¡No más excusas!, persigue tus sueños, ¿Cómo?, marcándote objetivos en la vida y luchando por conseguirlos.
¡Seamos claros!, la vida no te va a regalar nada, será tu actitud ante la misma la que te hará lograr tus metas. La constancia, la fuerza de voluntad, la capacidad de sacrificio y el trabajo duro son la esencia del recorrido hacia tus objetivos.
Inicia el camino y persevera en él, pues esa es la base de una "Buena Vida", de una "Vida Feliz".
¡Seamos claros!, la vida no te va a regalar nada, será tu actitud ante la misma la que te hará lograr tus metas. La constancia, la fuerza de voluntad, la capacidad de sacrificio y el trabajo duro son la esencia del recorrido hacia tus objetivos.
Inicia el camino y persevera en él, pues esa es la base de una "Buena Vida", de una "Vida Feliz".
Así es, señor. Lucha constante. Objetivos, metas. Pero lo que considero muy importante e incluso vital es poder mirar atrás y estar convencidos de que hemos DISFRUTADO DEL CAMINO. Enhorabuena por la entrada. Muchas gracias, maestro.
ResponderEliminarEsta vida esta llena de objetivos que unas veces conseguiremos y otras no...pero en esos llamemos , no fracaso si no intento fallido que si insistimos conseguiremos . Animo amigo, objetivo conseguido.
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