La vida está repleta de "dualidades contrapuestas" como son: VIDA-MUERTE, ALEGRÍA-TRISTEZA, PAZ-GUERRA, BIEN-MAL, PLACER-DOLOR, etc.
Dicho esto, esta semana os traslado una pequeña parte del pensamiento de uno de los grandes filósofos del siglo XIX en lo que respecta a la característica esencial del ser humano, que para él no es otra que "un continuo deseo siempre insatisfecho", se trata de Arthur Schopenhauer (22-02-1788 / 21-09-1860) que fue un filósofo alemán, máximo representante del pesimismo filosófico, esto es, una doctrina filosófica que sostiene que vivimos en el peor de los mundos posibles, un mundo donde el dolor es perpetuo y nuestro destino es tratar de obtener lo que nunca tendremos.
Schopenhauer sostuvo que el ser humano, mirando hacia su interior puede acceder al "conocimiento esencial del yo". Identificó a este yo como un principio metafísico al que denominó "voluntad" o "voluntad de vivir".
Sin embargo, en la medida en que la voluntad se expresa en la vida anímica del ser humano bajo la forma de un continuo deseo siempre insatisfecho, Schopenhauer concluye que "toda vida es esencialmente sufrimiento", y cuando el hombre consigue aplacar momentáneamente este sufrimiento, cae en el insoportable vacío del aburrimiento.
Por ello Schopenhauer propone un huida del mundo por medio de tres alternativas; según el grado de aniquilación de la "voluntad", a saber:
- La contemplación de la obra de arte como acto desinteresado (disfrutar del arte y su estética sin más).
- La práctica de la compasión (la preocupación por los demás), máxima de su ética.
- La autonegación del yo mediante una vida ascética (la renuncia al ego).
Con todo, lo que no aprueba es el suicidio como camino de huida del mundo, pues en estos casos el suicida no renuncia a la vida en si misma, sino a la que le ha tocado vivir en condiciones desfavorables.
Termino con algunas frases de este personaje, el cuál nos presenta un enfoque de la vida diferente pero cercano, con el que en mayor o menor medida podemos identificarnos, y que sin duda no nos dejará indiferentes:
"Toda vida es sufrimiento"
"La felicidad es solamente la ausencia de dolor"
"Pocas veces pensamos en lo que tenemos,
pero siempre en lo que nos falta"
"No hay ningún viento favorable para
el que no sabe a qué puerto se dirige"
"La vida es sólo la muerte aplazada"
Y ahora, ¿Cómo ves tú el "vaso", medio lleno o medio vacío?
Potente entrada esta semana, amigo Juan Ramón.
ResponderEliminarMucho qué pensar y cuánta razón en tu escrito.
Me ha encantado...