LA AUTÉNTICA LIBERTAD RESIDE EN TU INTERIOR

¡¡¡ HOLA A TOD@S UNA SEMANA MÁS !!!

 "No hay barrera, cerradura ni cerrojo

que puedas imponer

a la libertad de mi mente"

Virginia Woolf (1882-1941), escritora británica 

     Y es que, cada un@ de nosotr@s, con nuestras circunstancias particulares, es raro que no nos hayamos sentido en algún momento, "prisioner@s" o "esclavizad@s" ante alguna situación o experiencia vivida (presión social, familiar, laboral, etc.).

     No nos es fácil abordar determinados momentos, lo que puede generarnos cierta ansiedad. Pues, aún viviendo en sociedades democráticas, en las que su máxima es "la libertad", no es menos cierto que, a efectos reales, estas sociedades tienden a "esclavizar" al individuo creándole "dependencias materiales y sociales", por ejemplo, a tod@s nos es familiar el concepto "estatus social" con su jerarquización en "Clase Alta, Media, Baja, Pobreza, ...", con unas características propias que se le presuponen a cada uno de estos grupos en cuanto a nivel de renta, de propiedades, bienes de consumo, moda, etc. 

     Pues bien, siendo muy lícito que los que están en la parte "Baja" pretendan mejorar su posición y escalar en cuanto a su estatus social, esta lucha los lleva a fijar su atención en los que más tienen y en querer parecerse a estas personas, sacrificando a cambio su auténtica libertad, que comienza por mirar en su interior, aprender a quererse y valorarse un@ mism@ y, conseguido ésto intentar, sin traumas, avanzar y mejorar.

     Hemos de tomar conciencia de que, hasta la persona más rica del mundo, puede sentirse "prisionera" o "devorada" por dentro, sabiéndose esclava del dinero, pues es fácil que para estas personas nunca sea suficiente la renta de que disponen, pues siempre quieren más, entrando en un círculo vicioso de difícil solución.

     Por contra, puede haber personas que, aún no teniendo gran cosa o incluso encontrándose privados de una libertad personal real, se sientan auténticamente libres a nivel interno, porque saben que lo verdaderamente importante es quienes son, y no lo que la sociedad les dicta que sean. 

      Por supuesto no hemos de olvidar que, la libertad externa de una persona finaliza cuando comienza la de los demás, pero la libertad interior no tiene límites para su crecimiento y desarrollo, siempre que creamos en nosotr@s mism@s.